Vuelve el sol al valle, y aprovechamos para hacer una dura y larga excursión hasta las Pozas del barranco del Furco. Aprovechamos la mañana dándonos un refrescante baño en este maravilloso paraje. Tras la comida, tocó refrescarnos en la piscina y jugar a unos divertidos juegos de pruebas, que continuamos por la noche con el gran juego ''protege tu huevo'' donde el Dr. Eggtolo puso a prueba nuestras capacidades más inverosímiles.

Después de cenar probamos las deliciosas tartas que realizamos el día anterior y comprobamos que somos unos grandes chefs. ¡Qué ricas estaban!